Los españoles somos imbéciles

Y ustedes perdonarán haberles atraído hasta esta página con semejante titular que sólo es parcialmente verdad. Dejémoslo en que somos “imbe”.

Nos pasamos el año despotricando contra nuestros políticos, sean quienes sean realmente “nuestros”. Nos pasamos el año asombrándonos de sus asnadas, de sus despropósitos y de sus ausencias del puesto de trabajo. Pero los volvemos a reelegir. ¿No somos por lo menos “imbé”.

Piensen en Pedro Castro, el alcalde de Getafe. ¿No ha demostrado a las claras que de demócrata tiene poco, por molestarle que los españoles usemos la libertad de conciencia, de expresión y de voto en otros candidatos que no sean los suyos? ¿No ha demostrado su intolerancia y su necedad sobradamente? ¿Apostamos a que vuelve a salir? ¿Cuántas legislaturas lleva ya siendo votado por sus conciudadanos? ¿No somos “imbé”?

Piensen en Carlos Fabra, el presidente de la Diputación de Castellón, ese “peazo” de alma sensible que manifestó que como le tocase la lotería “me sacaré la pirula y mearé en la sede de Izquierda Unida". Delicadeza fina. Ello a cuento de un fotomontaje que se ha hecho con su cara y un número de la lotería, del que acusa a Izquierda Unida. Ejemplar, el individuo. Tan respetable demócrata como el de Getafe. Pues a pesar de ello y de su convulsa vida… en Castellón están encantados con él. Ver para creer. ¿Se imaginan a un conservador padre de familia, quizá incluso religioso, votando a este soez individuo? Pues al parecer lo hacen. Somos “imbé”.

El tercer ejemplo de lo que quería hablarles es el de Tardá, el republicano independentista catalán. Ciertamente su frase encaja más con el conjunto de planteamientos, manifestaciones y actitudes de su partido… ¿El conjunto de planteamientos, manifestaciones y actitudes de su partido no hace que los catalanes que les voten sean “imbé”?

Y otro día hablaremos del gobierno, más de uno/a da para completar la palabra, pero de momento les dejo que añadan ustedes las expresiones que recuerden de nuestros gobernantes. Todas, claro. Verán cómo por lo menos somos “imbé”.

¿Se acuerdan de “la miembra”?