¿Dónde hay que firmar para ello? España será distinta el día que los ciudadanos dejemos de tomarnos a cachondeo las elecciones generales (bueno, todas las elecciones) y exijamos responsabilidades... esto... mercantiles a los políticos. Ojalá sea verdad algún día.
La Plataforma 'Leyes Animales ya' ha presentado este viernes una demanda en los juzgados de primera instancia de Madrid contra el PSOE por no cumplir de forma "reiterada, deliberada e injustificada" su promesa electoral de incluir en el Código Penal artículos relativos a los malos tratos a animales. ¿Cómo no lo ha hecho antes nadie, cómo es que durante tantos años de democracia no se le ha ocurrido a nadie?
Las promesas electorales deben ser un contrato, pues nos las presentan para comprar nuestro voto, y los contratos se firman para cumplirse o en caso contrario para exigirse. Si las cosas fueran así nuestros políticos no se llenarían la boca con demagógicas estupideces, como crear millones de puestos de trabajo con un chasquido de dedos, ni nos prometerían acabar con el paro en un par de semanas y disparates de tal calibre. Si las cosas fueran así, los políticos no basarían sus programas en la memez, la ignorancia y la incultura de grandes capas de votantes, puesto que lo que importa es, como en los programas basura, que haya millones de personas entregadas. Hasta el sistema educativo sería infinitamente más exigente, atractivo y amplio de miras para que los niños, futuros votantes, no presentaran demandas.
Afortunadamente para la casta política los españoles no les tomamos en serio, por eso no nos importa que crean que nos engañan con sus disparates, nosotros votamos disciplinada y agilipolladamente para cumplir con nuestro deber ciudadano y nos olvidamos hasta cuatro años más tarde. Hacemos mal y lo sabemos pero somos incapaces de rebelarnos, por eso que la plataforma “Leyes animales ya” se haya animado a llevar a los tribunales a Zapatero es un primer paso que puede llegar a ser más importante que el del primer astronauta que pisó la Luna, más aún: será un ejemplo que seguir por cuarenta millones de ciudadanos amuermados, aburridos y hastiados, hasta ahora incapaces de rebelarse contra su vacío destino astutamente programado por las clases dirigentes.
Ni siquiera será necesario que ganen el juicio, su triunfo será simplemente que haya juicio y se siente en el banquillo aquel que haya firmado el programa electoral del PSOE ¿Su secretario general? ¡No caerá esa breva!
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