Este invierno se nos avecina duro, prepárense calefacciones y mantas, a ser posible mantas de Palencia, que Chávez, Don Hugo Chávez, ha congelado las relaciones de Venezuela con España. Pero no sólo las relaciones con España, también las que mantiene con Colombia, a cuyo jefe de Estado ha llamado mentiroso. Exactamente ha dicho: “Las relaciones con Colombia las meto en un congelador porque no creo en nadie en el Gobierno de Colombia. Lo que el presidente de Colombia hizo es lanzar un escupitajo brutal en nuestro rostro. Ha emitido un comunicado cargado de mentiras y eso es grave”. Ahí, es nada, no hay quien gane al machote orangután venezolano.
A este paso se va a quedar solo en el mundo, si sigue congelando relaciones (¿será para vendernos más petróleo?) se quedará de jefe máximo de todo, no habrá nadie que pueda hacerle sombra, que a lo peor es lo que busca. ¿Se imagina alguien a Chávez de “baranda” total? ¡Qué maravilloso sería el mundo para él si no encontrara a nadie que le mandara callar, un mundo en el que él pudiera interrumpir a los demás sin que nadie pudiera cortar sus discursos!
Pero, ustedes, amables lectores, ya saben que no es posible tamaño dislate, que hay una muy intencionada hipérbole en mis palabras, porque no es cierto que Chávez quiera quedarse como único dueño del mundo. Él, que es sabio y generoso, no pretende meter en el congelador a todos los jefes de Estado del mundo, necesita compartir el poder y el mundo con Fidel Castro y Evo Morales, grandes paladines de la democracia, y con ellos dirigir todo cuanto suceda en la tierra, desde quién tiene derecho a salir y entrar de sus respectivos países hacia Miami, hasta quién tiene derecho para emitir por televisión. Si los espías españoles (ah, ¿pero tenemos?) se empeñaran, serían capaces de averiguar que estos paladines de la libertad incluso son capaces de decidir entre chistes y bromas, entre discurso y discurso, quién ganaría la copa sudamericana de fútbol. Viva la libertad.
¿Fútbol? Ah, no, que no, que tanto en Cuba como en Venezuela el deporte rey (perdone, presidente Chávez, no es más que una frase hecha) es el béisbol… Entonces no será posible que se pongan de acuerdo al respecto, tendremos conflicto armado. Ni Chávez ni Castro están acostumbrados a ceder sino a imponer. En un mundo en el que todos los presidentes de gobierno, salvo Castro, estén en el arcón congelador de Chávez la primera guerra será por cuestiones deportivas…. ¿Saben lo que les digo? Que ya no estoy tan seguro de que Chávez pretenda compartir el gobierno del mundo con Castro
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