Soy un lector impenitente de Públiko, me encanta leerlo, no hay día en que no lo haga, no hay nada como Públiko para saber cómo piensa el intolerante facherío nacional. Entre las pesadas obligaciones cotidianas está la lectura gratuita de la web del periódico trotskista “millonarista”.
Pero permítanme aclarar que lo más interesante no es lo que escriben sus informadores o sus columnistas. Apenas paso de los titulares, de las letras gordas de los encabezamientos, hay cosas que sientan mal a cualquier cuerpo y pa qué seguir torturando mi intelecto, por limitado que éste les parezca a mis lectores.
No, lo más interesante es leer los comentarios que escriben los lectores. Algunos, y sólo algunos de ellos, destilan pura intolerancia fascista y guerracivilista así como una antiquísimo anticlericalismo que ni los comecuras del siglo XIX. A veces uno puede sorprenderse de que después de la Revolución Francesa, después de la independencia de toda América, después de que el Hombre haya llegado a la Luna, todavía pueda pensarse así, pero ésa es la España que nos tenemos que comer... antes de que algunos españoles, bienpensantes demócratas de toda la vida, se nos coman a los que ejercemos el irreverente derecho de pensar lo contrario que ellos.
El caso es que todos los días me encuentro en la misma disyuntiva: Ver una peli de Jerry Lewis o reírme con los espontáneos escribidores de la web de Públiko. Impenitentemente dejo al cómico americano, a pesar de que sus argumentos son mucho más actuales, y me lanzo a los comentarios del periódico, puesto que éstos son más efímeros. Ya que son ejemplos cotidianos de intolerancia, me desayuno un par de pastillas de Almax justo antes de tragarme diez o doce comentarios de los cachondos lectores trotskistas. Permítanme que les ponga un par de ejemplos, con ellos cerraré el artículo, pues se explican solitos y ustedes necesitarán tiempo para contener las carcajadas. El artículo que he escogido hoy se refiere a la muerte por causas naturales de un etarra, acusado de colaborar con las FARC. Tómense ustedes media caja del antedicho Almax o una tortilla de aspirinas, lo que prefieran, luego no me vengan con que no estaban avisados:
“Me parece lógico y normal que un militante comprometido con la lucha del pueblo latinoamericano contra las oligarquias dominantes en aquella zona, y contra el terrorismo de Estado que practican de manera sistemática numerosos gobiernos de Latinoamérica, ofrezca sus conocimiento y apoyo a dicha causa......algún problema ???. Bona dia des de València !!” Y lo firma Lluis Valencia. Las faltas de ortografía se las he corregido yo, conste.
“Toma carnaza fresca para alimentar el memoestar global... Y KE, si entrenó a las FARC??... Es un ciudadano libre para hacer lo ke crea consecuente con sus ideas, ya cansa tanto cotilleo...” Firmado Manu67. Angelito de la democracia, el Manolo este, añado.
Y les ruego tomen nota de la siguiente prenda: “TODAS Y CADA UNA de las informaciones que vinculan a ETA con las FARC provienen de "fuentes" del estado colombiano. TODAS Y CADA UNA de esas informaciones suelen acabar DESMENTIDAS a los pocos días. TODAS Y CADA UNA de estas mentiras demuestran ser, por sí mismas, bulos que el gobierno colombiano difunde con el objetivo de implicar al Estado español en el terrorismo de estado colombiano financiado por EEUU.
¿Recuerdan que hace poco se encontraron "documentos" que "probaban" que ETA asistía técnicamente a las FARC en la preparación de un atentado con cañones en la toma de posesión del nuevo pelele de los yanquis en Colombia? ¿Cuándo se ha visto a ETA atentar con cañones? ¿Podría una organización que no pasa del tiro en la nuca y la bomba lapa aconsejar técnicamente a nadie en el uso de cañones en atentados? Ya está bien de informaciones ridículas no contrastadas. El periodismo pagado y forzado por las grandes fortunas mediáticas está perdiendo a marchas forzadas su credibilidad...”. Firmado por Plusvalor. Ahí queda para la posteridad su afirmación de que ETA es “una organización que no pasa del tiro en la nuca y la bomba lapa” ¿Acaso no es mejor que una peli de Jerry Lewis? Pa partirse la mandíbula. Oiga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario