Tantas veces dándole vueltas para encontrar motivos de alabanza a Zapatero y por fin, a la vuelta de página de cualquier diario digital me lo he encontrado. Viva Zapatero, hombre, por siempre jamás.
No, el paro no se ha reducido. No, a los funcionarios no les han devuelto ese 5% que les redujeron, ni a los jubilados les han subido la pensión que les ultracongelaron en alta mar, dado que el gobierno Zapatero es un buque factoría de productos antisociales. No obstante… Zapatero se merece un “viva” muy grande porque nos puede devolver la auténtica navidad, la de siempre, la profunda, la sincera, la que no se basa en llenar la mesa de manjares, de cava (joé, en Rueda hacen un “champán” castellano que quita el hipo) ni de colmar a la Misanta de regalos de la tienda de los chinos de la esquina de ahí abajo.
El caso es que la crisis que según Zapa no venía, la crisis que cuando venía no nos iba a afectar a los que estábamos en la Champions ligue, los brotes verdes que nunca existieron y las mentiras solemnes que Solbes nos colocó en el famoso debate contribuyen de manera efectiva a reducir el gasto escandaloso, amoral y radicalmente capitalista, consumista y antisocial al que los españoles nos lanzamos desbocados, desmadrados y desinhibidos todos los fines de año.
Quizá así, cuando sobre nuestras mesas no veamos los 735 euros del año pasado distribuidos en mariscos, vinos caros, dulces exquisitos y manteles de hilo de oro, sino solamente 655 (Que ya está bien, manda narices, con la crisis que dicen que tenemos. ¿Crisis? Seguro que es una mentira de la derecha traicionera, franquista y cavernícola del PP) caigamos en la cuenta de qué narices estamos celebrando.
Aunque ahora que lo pienso… ¿qué pensará el PSOE y su corifeo laicista, sector meapilista, cuando se den cuenta de que se trata de una fiesta cristiana? ¿La prohibirán? ¿La sustituirán por la musulmana fiesta del cordero? Noooooooo, amigo lector, usted sabe muy bien qué harán: la negarán rotundamente. ¿Fiesta cristiana ellos? ¡¡¡Jaaaaamás!!! Ellos en realidad se limitan a celebrar, como los druidas celtas, la fiesta del solsticio de invierno y las muy seculares fiestas de fin de año. Eso es todo. Abajo la Iglesia, arriba los parias de la Tierra.
Eso, que se levanten los parias de una puñetera vez, que la famélica legión se ponga en pie para ir a la cola del INEM, a pedir en las puertas (de una Iglesia, por supuesto) o al comedor de Cáritas. Anda, que si los parias de la Tierra…, esto…, a ver, …anda que si los parias de España se organizaran y fueran a la Moncloa a felicitarle las pascuas (bueno, el solsticio de invierno) a Zapa le iban a tocar la zambomba de narices.
PD: Mejor que no vayan, seguro que ese día tiene un viaje urgente a Afganistán.
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