Como los malos entrenadores de
fútbol Rubalcaba no se comerá el turrón en el banquillo del PSOE. Tal como
vienen las encuestas, sobre todo una, la importante, la del CIS, a Rubalcaba le
quedan días, un par de semanas, para que le obliguen a presentar la dimisión.
No sé si habría sido o no un buen presidente de gobierno, depende de cuánto se
alejase de su nefasto predecesor. El hecho de heredar una crisis tan profunda
habiendo sido cómplice de ella como ministro hace imposible su elección. El
PSOE está hundido, España también y ni siquiera algunos de sus correligionarios
le apoyan firmemente, aunque de cara al exterior todo sean buenas caras. De
momento basta observar que han regresado de su brazo a la actualidad dos
jubilados socialistas, dos de las personas que había marginado Zapatero. Pero
si el resurgir socialista depende de los jubilados... ¿dónde está la
renovación, dónde el futuro, dónde la esperanza? La presencia en el mitin de
Dos Hermanas de González y Guerra es la confirmación del desastre zapateril.
¿Por cierto, dónde está Zapatero, cuántos mítines va a dar, acaso lo esconden?
España va a dar un bandazo,
confiando mayoritariamente en Rajoy y otorgándole una aplastante mayoría y por
lo tanto una enorme responsabilidad. ¿Y el PSOE? ¿Qué va a ser del PSOE? Un
descalabro importante debe ser, será, un punto que indique el retorno, no cabe
esperar que le suceda lo que ocurrió con UCD. Sin embargo en el mitin sevillano
hemos visto, así como en declaraciones de Rubalcaba, las primeras imprecaciones
contra la Iglesia, qué tradicional obsesión, ¿no es eso inmovilismo
decimonónico, no es eso un gesto demasiado rancio? ¿Es la Iglesia un problema
para España, impide el progreso de la industria, de los obreros, de los
marginados? Bueno, pues de momento el programa socialista va por ahí. ¡Qué
adelanto!
El futuro, ¿por dónde va a ir el
futuro del PSOE? Rubalcaba está descartado, no se comerá el turrón y pasará a
la reserva, será un diputado más, quizá enseguida sea un jubilado de oro, nada
parecido a los jubilados obreros, y enseguida pasará al recuerdo, en las
siguientes elecciones apoyará al candidato socialista como ahora lo ha hecho
Guerra. El futuro pasa por los jóvenes Patxi López y Carme Chacón. Dado el
radicalismo nacionalista de ésta y que el apoyo del PSC será imprescindible...
¿alguien admite la apuesta de que será la próxima candidata del PSOE? Dada su
actitud catalanista, su defensa de lo catalán frente a lo español, de lo
particular frente al bien general... ¿cuántos votos va a dejar de tener el PSOE
en Sevilla o Valladolid?
No hay comentarios:
Publicar un comentario